lunes, 25 de marzo de 2013

Los ojos de la guerra

Necesito que esta obra de arte, este gran reportaje, tenga un hueco en mi Membrillo.

Los ojos de la guerra.

Más de hora y media de puro periodismo, humanidad, historias reales y vida de periodistas 100% dedicada a su profesión. Y en territorio hostil.

Me ha gustado verlo.
Siento admiración por todos vosotros.

Reporteros de guerra: sensibilidad y dignidad profesional.


De igual a igual y en Granada: donde se reinventa la historia


La Escuela de Pacientes de Andalucía celebró el viernes15 de marzo su segundo congreso, eminentemente práctico, en donde los asistentes pudieron aprender a mejorar su calidad de vida compartiendo experiencias con otros pacientes y con profesionales de la salud. Ese fue el objetivo de este encuentro que consolida el éxito de participación y, sobre todo, emociones del primer encuentro.

Toda una institución a nivel nacional y referente por poner en marcha programas innovadores para hacer comunidad de pacientes, para que la gente no se sienta sola ante la adversidad de la enfermedad, para ayudar a entender los procesos patológicos y para mejorar calidad de vida de aquellos con enfermedad crónica.



Pacientes que se convierten en formadores de otros, que nos enseñan a comer sano, que consideran las sonrisas y los abrazos como parte de su tratamiento, que conviven con la enfermedad día a día hasta el final de la vida. Pero no sólo ellos, también sus familiares y su entorno. Pacientes que le dan la vuelta a la realidad y hacen fácil lo difícil, y nos abren los ojos para que nos preocupemos de lo realmente importante, a disfrutar del invierno, de un día de lluvia o de los rayos de sol...en definitiva, de la vida.

Gente que no se encuentra sola, que habla de su enfermedad con libertad, sin miedo y sin vergüenza, que rompe tabúes, que se siente apoyada y acompañada. El paciente en el centro y todo un mundo por descubrir, no en soledad. Nunca solos.

Qué mejor sitio para todo ello que en la Granada milenaria. La ciudad viva y mágica que trata igual a los iguales. Porque las cosas pasan por algo en un lugar y momento concreto.

(Este post fue publicado el pasado jueves 21 de marzo de 2013 en el espacio "pacienteApaciente", blog de la Escuela de Pacientes de Andalucía. Gracias, Joan Carles March, por contar conmigo una vez más.)

domingo, 10 de marzo de 2013

Castilla-La Mancha y sus periódicos


No nos preciamos de ser una de las comunidades autónomas que más periódicos compra y lee, pero sí al menos yo me sentía orgullosa de que cada provincia tuviera su cabecera en papel, esa que buscaba ávidamente cuando viajaba con frecuencia a Toledo, Cuenca, Ciudad Real o Guadalajara.

El equilibrio en materia informativa, número de cabeceras, periodistas trabajando,... estaba más o menos asegurado.

Pero el ansia por tener más y más hizo que los empresarios dueños de los medios, crecidos al amparo de suertes económicas que nada tenían que ver en origen con el mundo de la comunicación, extendieran sus redes de provincia en provincia, ampliando no se sabe muy bien con qué criterio el número de medios de comunicación en la región, agencias, televisiones, periódicos, radios,  ... 


Señores de corbata y traje del mundo de la construcción, de las máquinas tragaperras y de la automoción, caballeros que igual te gestionan un recurso turístico, un club de balomnano o un semanario. ¡Vamos a montar un periódico que es divertido!

En Albacete de repente contábamos con cuatro periódicos. Se abrieron emisoras de radio por un mero empuje político y se pensó que eran las administraciones públicas, con el dinero tuyo y mío, las que debían sostener a todos estos nuevos medios.  

Error.

Un error imperdonable del que se han beneficiado los empresarios de la comunicación de esta región, ni siquiera los políticos que en su día los apoyaron y que hoy están en la oposición. Por cierto, que los que hoy mandan, tampoco se libran de prácticas periodísticas extrañas que acabarán saliendo a la luz tarde o temprano.

Es lo que tiene centrar los ingresos publicitarios en el mandamás del momento. Que de repente cambia el Gobierno y los medios están vendidos. Y lo que es peor, los periodistas también. Fin a su independencia, fin a su libertad. A la calle y con una mano delante y otra detrás.

Ayer se anunció el cierre de otro medio, el periódico El Día originario de Cuenca. En Albacete, la delegación se disolvió hace ya más de un año y los periodistas que trabajaron en ella aún esperan cobrar nóminas pendientes y celebración de juicios. Una vergüenza.

Os dejo con el testimonio directo de una de estas personas, la periodista María Varea.